AUNT MARY - LIVE BARBED WIRE WAVES (1.971)

De nuevo visitan esta soleada casa sonidos venidos de las gélidas tierras escandinavas, que son uno de los bastiones del metal cañero. Si en anteriores recorridos por esas tierras nos han visitado grupos suecos y fineses, en esta ocasión, para cerrar el circulo escandinavo, le toca el turno a una de las mejores bandas noruegas que surgieron a inicios de los 70,s. De las pocas cosas que no tengo dudas, es que cuando pienso en la banda por excelencia Noruega de la incipiente etapa setentera, instintivamente Aunt Mary toma todo el protagonismo. Y cuyos tres primeros álbumes Aunt Mary (1.970), Loaded (1.972) y Janus (1.973), son fundamentales e imprescindibles para entender la música de esta fabulosa banda, tres auténticas gozadas que con el tiempo se convirtieron en toda una referencia para mí.

Lo suyo en sus comienzos era una mezcla de refinada psicodelia, de aromas jazzy y prog, todo ello bañado de sugerentes melodías y muchos metales, que adornaban su sonoridad de forma maravillosa, a partir del segundo álbum con la marcha de alguno de sus miembros originales, su música evoluciona hacia un hard-rock de toques prog, hasta que en 1.973 deciden separarse, luego en los 80,s vendría la reunificación.

Pero, para esta primera entrega no he querido escoger uno de sus álbumes en estudio, sino, una rareza como el EP Live-Barbed Wire Waves, que apareció en el 2.009, y que recoge una sesión que grabaron en Stockholm para la Swedish Radio en Octubre de 1.971, en el que nos encontramos cuatro intensas canciones con una sonoridad mucho más pesada que en su primer álbum de estudio, y donde ya desaparece toda referencia a los instrumentos de viento, aquí la guitarra y el órgano de sonido pesado se explayan y toman todo el protagonismo.

Como decía, 4 canciones son las que trae este EP, que para ser sinceros suenan bastante bien, hard rockeras a más no poder, con un guitarrista que en ciertos momentos está bastante desatado. Ya desde la inicial Stop Your Wishful Thinking nos dejan claro por donde van a ir los tiros, dureza sónica a tope, con la áspera guitarra y el órgano marcando distancias. Estremecedora suena la versión que hacen del clásico de Edvard Grieg, In The Hall Of The Mountain King, en la que de nuevo los arrebatos guitarreros ponen la esencia hard-rockera, mientras el órgano sigue aportando ese protagonismo necesario para darle un toque melodioso. En Listen To The Music, sacan el lado más agresivo de la banda, con una guitarra que dinamita todo por completo, sorprendiéndonos por completo con su infernal y distorsionado solo ¡ todo un arrebato de potencia !. Para despedirse nos entregan I Wish I Could, donde nos introducen en terrenos del hard-blues más arrebatador, de nuevo con un enorme Bjorn Kristiansen a la guitarra, cuyo trabajo en este EP es descomunal, como el de toda la banda, dicho sea de paso. ¡ Que grandes eran estos tipos !. ... Cuatro potentes canciones que cumplen el requisito para pasar un buen rato ¡ Una auténtica pasada sónica !...

Personal :

Bjorn Kristiansen : Guitar.
Jan Groth : Organ.
Svein Gundersen : Bass.
Ketil Stensvik : Drums.