MOLOCH - MOLOCH (1.970)

 

Vuelvo a refugiarme en uno de esos trabajos desconocidos que llevan en mis estanterías mogollón de años llenándose de polvo, y que en estos instantes son todo un bálsamo milagroso con el que salir de la apatía que se adueña de mí en estos calurosos días. Y que mejor forma de hacerlo que con alguna banda de la arena más bluesy a la que merezca la pena engancharse, y sin tener que darle muchas vueltas, he dado con esta banda fundada en Memphis (Tennessee ) allá por el 69 y que se hacían llamar Moloch. Y mi sorpresa ha sido mayúscula, deleitosa y gratificante al volver a escuchar su álbum debut, y encontrarme con una amalgama de sonidos bluesy que no me esperaba y me han encandilado, porque hacía demasiado tiempo que no lo escuchaba y mis recuerdos hacia él se habían difuminado.

Moloch me han parecido una contundente banda de crudo blues, y su álbum debut de lo más correcto, con algún corte de auténtica enjundia, donde las buenas guitarras dan lustre a este interesante disco. No se mucho de ellos porque he encontrado muy poca información por la red, pero me han bastado un par de escuchas del disco para enamorarme de él y de la banda que lo firma. ... Uno de esos discos capaces de proporcionarnos numerosas satisfacciones ...

Así nos podemos encontrar en este debut una buena dosis blues de diferentes texturas, todo ello realizado con una buena crudeza sónica, y con unas sonoridades fuzzy en las guitarras que son muy de agradecer. El disco esta plagado de temas que llevan el sello compositivo de Don Nix, uno de los claros exponentes de lo que se denominó " Memphis Sound ", que además hace las veces de productor. Sin duda el álbum goza de las influencias de la época en que fue concebido y publicado. El comienzo es soberbio, encadenando la tremenda Helping Hand que abre el disco y Maverick Woman Blues, en las que despliegan su descarada propuesta sónica, repletas de riffs fibrosos y solos musculados que llenan nuestros oídos de sensaciones repletas de energía. Los sonidos de corte más blues-soul muy del gusto de Don Nix nos llegan de la mano de temas como Same Old Blues o I Can Think The Same Of You. Ecos de blues de sonoridad más cruda nos llega de la mano de Dance Chaney Dance, Mona o de la tremenda Going Down, que aquí suena algo diferente a las más conocidas versiones de Jeff Beck, Freddie King o Eric Clapton. El blues de porte más clásico nos llega con la estupenda Night At The Possum, que es uno de los mejores momentos del disco, con una buena presencia de órgano y un encendido solo de guitarra, la fantástica She Looks Like An Angel, con una poderosa armónica, o la electrizante People Keep Talking.

En definitiva, una sorpresa en toda regla estos Moloch, y un disco que es una pasada y que recomiendo muy gustosamente, porque pasaréis un buen rato.

Personal :

Lee Baker : Guitars, Vocals.
Gene Wilkins : Lead Vocals.
Fred Nicholson : Organ.
Philip Durham : Drums.
Steve Spear : Bass.

FRANK ZAPPA AND THE MOTHERS OF INVENTIONS - ONE SIZE FITS ALL (1.975)

 

Durante muchos años mantuve con Frank Zappa una relación bastante ambigua, una relación llamemosla de amor/odio que se prolongó durante años, en especial con sus trabajos de mediados de los 80,s y principios de los 90',s. Y lo cierto es que conocía bastantes de sus discos y solía escucharlos con asiduidad, sobre todo los de su etapa más setentera que eran los que más me excitaban. En cambio había algo, no se que, que hacía que sus trabajos de mitad de los ochenta y posteriores, me supusieran un cierto freno a su aceptación, y que evitaba que otorgase a parte de sus trabajos de esa etapa el mismo respeto que sentía por sus obras setenteras, quizás, fuese porque me pareció una etapa más difusa y experimental en su sonoridad, más diversificada y compleja para mis oídos, realmente no lo sé, pero el caso es que me parecieron menos transcendentes, y eso me hizo dejar de seguir explorando en el universo Zappa. Luego con el tiempo salde en parte mi deuda de injusta indiferencia por parte del que escribe, y que hoy se rinde a buena parte de los discos que facturó en su etapa ochentera el genio de Baltimore ( alguno hay aún que tengo que reconocer que me cuesta ), pero las malas experiencias ya son las menos.

 ... Así que hoy le voy a dar una vuelta al rodillo de la memoria y para abrir boca, voy a darle un repaso a uno de sus discos más representativos de lo que yo denomino trilogía de oro, que está compuesta por Over-Nite Sensation (1.973), Apostrophe (1.974) y One Size Fitz All (1.975), que me parecen los trabajos más chispeantemente rockeros de toda su carrera. ... 

Y de esos trabajos que tanto me apasionaron de esa mágica etapa, me apetece hablar de un auténtico discazo como es One Size Fitz All que registró en 1.975, y que me parece el disco que mejor integra esa nueva etapa marcada por la excelencia sónica de mediados de los setenta, ya que se acompaña de unos músicos de una calidad instrumental extraordinaria, que realizan un trabajo impagable. Un disco musicalmente muy rico y de estructura bastante compleja. Con unas composiciones de una cierta complejidad intrincada como son la maravillosa Inca Roads, con unos virtuosos pasajes instrumentales, o la portentosa Pro-Jama People, con un descarnado solo de guitarra de esos que te dejan sin aliento y un estribillo bastante divertido. También tenemos un par de piezas memorables como es el caso de la fascinante Florentine Pogen, con unos arreglos corales que son toda una delicia. La joyita bluesy que es San Ber'dino, una gozada de tema con un cortante riff de guitarra realmente titánico de esos que hacen temblar los bafles del equipo, y la genial Andy, un tema impresionante con un solo extraordinariamente aguerrido. El resto no desentona en absoluto y la demostración más palpable la tenemos en la deliciosa Sofa nº 1, un instrumental con una lírica sonoridad fácil de digerir, y la desbocada a la vez que juguetona Can't Afford No Shoes, que es poseedora de un contagioso estribillo.

Da pena despedirse de esta litúrgica ceremonia musical a la que nos somete Frank Zappa y sus inmortales Mothers Of Inventions en este One Size Fits All ( por cierto que será su último trabajo con ellos ), en la que nos da lo que necesitamos, lo que queremos todos, tanto los feligreses más entregados a la fe Zappariana, como los que empiezan a dar sus primeros pasos en esa cofradía del pecado llamada Mothers Of Inventions.       

Uno de sus mejores trabajos que está repleto de momentos realmente geniales de los que solo pueden ofrecer placer al oyente, y muy recomendable para oídos poco expertos en el delirante universo Zappa.    

Personal :

Frank Zappa : Guitars, Vocals.
George Duke : Keyboards, Vocals.
Napoleon Murphy Brock : Flute, Tenor Sax, Vocals.
Chester Thompson : Drums.
Tom Fowler : Bass.
Ruth Underwood : Vibes, Marimba, Percussion.
James Youmans : Bass.
Johnny "Guitar" Watson : Flambe Vocals.
Bloodshot Rollin' Red : Harmonica.

BUBBLE PUPPY - A GATHERING OF PROMISES (1.969)

 

Debo reconocer  que siento un especial aprecio por esta banda tejana llamada Bubble Puppy, y su estupendo álbum debut A Gathering Of Promises. Que en el fondo sería uno de los últimos alientos que se dio la psicodelia americana allá por 1.969. Un disco que vuelvo a recuperar después de unos cuantos años de injusto abandono. Porque se trata de una auténtica joyita de la psicodelia americana sesentera. Un excelente trabajo que según han ido pasando los años voy valorando cada vez mucho más, e incluso ahora que vuelvo a traerlo a escena lo considero de magistral.  

Bubble Puppy, es otra de esas bandas psicodélicas a las que tanto me aficioné en su día. Como otras muchas bandas de esa onda, se caracterizaban por la combinación de cuidadas melodías con un brioso sonido de guitarras. Dando como resultado un trabajo sumamente hermoso, elegante y de tono bastante crepuscular. Con temas tan estupendos como la majestuosa I've Got To Reach You, una de esas canciones de atmósferas blues-psycho que me gusta más cuanto más la escucho, y eso que ya me entusiasmo una barbaridad la primera vez que la escuché. Y es que quién puede dejar de sucumbir a esa melodía de voz cálida y a esa vorágine de hirientes y psicodélicas guitarras. Otro punto álgido es la alucinante Hurry Sundown, que nos engancha con su adictiva melodía y sus enardecidas guitarras. Pero también me tienen completamente subyugado temas cargados de ácida energía como la inicial y poderosa Hot Smoke & Sassafras, la dinámica Lonely, o la tremenda Todd,s Tune, excelentes temas que son una auténtica fiesta ácida cargadas de delirantes y alucinantes riffs de guitarra. Otras que también me dejan un regustillo muy especial porque están repletas de colorida y hermosa psicodelia, son la evocadora It's Safe to Say, y la preciosista balada A Gathering Of Promises, con unas armonías vocales que suenan celestiales.

Bubble Puppy a pesar de su corta trayectoria ( posteriormente pasarían a llamarse Demian sacando un único trabajo ), y de que pasaron bastante desapercibidos, para mí, se convertirían en una de esas bandas que figuran entre mi elenco de elegidas de la psicodelia sesentera. Porque este único álbum que nos dejaron es de una calidad innegable, y de un gran calado ácido. ... Un brillante trabajo que merece mucho la pena rescatarlo para deleite de nuestros oídos ...

Personal :

Rod Prince : Vocals, Guitars.
Todd Potter : Guitars, Vocals.
Roy Cox : Bass, Vocals.
David "Fuzzy" Fore : Drums, Vocals. 

ROY BUCHANAN - SECOND ALBUM (1.973)

 

No recuerdo que tema fue el que me hizo acercarme a este fantástico guitarrista ( pionero del sonido Telecaster ) llamado Roy Buchanan " el mejor guitarrista más desconocido del mundo ", pero si lo que sentí cuando escuché su apabullante Second Album allá por mi adolescencia setentera. Fue una mezcla de atracción por las buenas maneras guitarristicas que demostraba en cada uno de sus temas que me hacían levitar, al tiempo que sentía un auténtico placer por disfrutar de esa música que sentía como íntima y repleta de buen gusto que no estaba exenta de un impresionante feeling. También tuve el convencimiento íntimo, aunque bastante inconsciente en esos momentos, de que tarde o temprano los discos de este increíble guitarrista tendrían un hueco bastante importante en mi estantería.    

Y lo cierto es que así fue, aunque con algo de retraso, fueron cayendo uno tras otro sus primeros trabajos desde el inicial Roy Buchanan de 1.972 hasta el You're Not Alone de 1.978. Y tengo que reconocer que cualquiera de ellos nunca pasaron desapercibidos para mis oídos y fueron los culpables de mi amor por el blues. Desde que puse la aguja sobre el negro acetato y empezaron a sonar las primeras notas de Filthy Teddy tuve claro que Roy Buchanan era un guitarrista de los grandes, probablemente ( para mí sin ningún genero de dudas ) de lo mejorcito de esa década setentera en su género. Este disco tiene todo lo que un amante del blues puede pedir, atmósferas delicadas y solos orgásmicos. Pero sobretodo, la refinada guitarra de Roy Buchanan que lo borda absolutamente en todos los registros que los temas requieren, en los más reposados y melódicos, y en los de más dureza. Su sonido con la Telecaster es increíble ¡ no hay nada más que oírlo en cualquiera de sus temas !. 

No puedo dejar de mencionar la adicción inmediata que me produjeron temas como la elegante I Won't Tell You No Lies, con sus conmovedoras texturas entre el blues y el jazz. La disfrutable Five String Blues, un escalofriante blues donde la entrañable  Telecaster de Roy se lleva todo el protagonismo. O la vertiginosa ráfaga rhytm & blues que es Tribute To Elmore James, todo un vigoroso homenaje a ese gran bluesmen. Pero si hay un tema que es una verdadera gozada, ese es el endiablado blues After Hours, en el que nos asombra con las desgarradoras notas que le saca a su Telecaster. También nos lleva por terrenos reposados de texturas más blues-country, como es el caso de la inicial Filthy Teddy, la delicada Thank You Lord, o la que cierra el álbum She Onced Lived Here. Y por otros de sonoridades más contundentes como es la enérgica Treat Her Right.

Sin lugar a ninguna duda ¡ todo un grande de la guitarra !. Un auténtico genio en estado puro. Lástima que nos dejara en tan extrañas circunstancias, pero siempre nos quedará el maravilloso legado de este artista único.     

Personal :

Roy Buchanan : Guitars.
Dick Heinze : Keyboards.
Teddy Irwin : Rhytm Guitar.
Chuck Tilley : Vocals, Rhytm Guitar.
Don Payne : Bass.
Ned Davis : Drums.

THE SMALL FACES - OGDEN'S NUT GONE FLAKE (1.968)

 

Como he comentado en recientes entradas, todo lo que no sonara verdaderamente roquero, o suficientemente duro, de entrada lo desechaba muy alegremente, y así lo hice con toda una serie de discos, bandas y estilos musicales que sólo muchos años después, libre ya de unos cuantos prejuicios, sería capaz de disfrutar y valorar debidamente. Y una de esas bandas desechadas en un primer momento fueron los británicos The Small Faces, a quienes en su día recuerdo haber oído con uno de sus temas más emblemáticos Itchycoo Park, y que rápidamente fueron etiquetados por mí como empalagosos, sin que les prestara desde ese momento mayor atención.

Pasado el tiempo, afortunadamente cambió mi percepción sobre bandas como The Kinks, Traffic o The Small Faces. Sobre estos últimos mi necedad supina cambió unos años más tarde cuando escuché por primera vez su tema Lazy Sunday, una auténtica joya lisérgica que estaba incluida en su álbum Ogden's Nut Gone Flake de 1.968. A partir de ahí todo cambió, y ahora cuando vuelvo a escucharlo detenidamente pienso ¡ bendita rectificación !, y no dejo de felicitarme cada vez que sus canciones acarician mis oídos, porque está repleto de paisajes de ensueño y sugerente psicodelia, plasmado en canciones ricas en matices y texturas de exquisita belleza y delicadeza.

Ogden's Nut Gone Flake es en cierto sentido una obra conceptual, ya que está estructurada en dos partes, la primera con canciones independientes y la segunda cuenta la historia de Mr. Hapiness Stan, un niño en busca de la mitad de la luna oculta, y cuya narración introductoria de cada tema corre a cargo del humorista sudafricano Stanley Unwin. El resultado de todo ello es un disco bastante equilibrado y diverso en el que la pegada lisérgica de temas como Long Agos And Worlds Apart o las más festivas Rene, absolutamente adictiva y Lazy Sunday que es una auténtica locura, conviven fantásticamente con pasajes más rockeros como la incisiva Song Of A Baker y con otros más claramente psicodélicos como la inicial Ogden's Nut Gone Flake, todo un delicioso instrumental. Tampoco dejan de sorprendernos cuando buceamos en temas más rhytm & blues como es la poderosa Rollin' Over con otros de linea más experimental como The Journey. La presencia más evocadora nos aparece en temas como Afterglow (Of Your Love) y Mad John. Y como cierre nos dejan un sutil toque festivo con la divertida Happy Days Toy Town.  ... En fin, que si le tengo que poner alguna pega, es que se podían haber evitado la narración de entrada en cada tema, porque por momentos cansa un poco ...

Pero por encima de esa pequeña pega, estamos hablando de fantásticas canciones, varias de ellas entre lo mejor del repertorio Small Faces, que hacen de este Ogden's Nut Gone Flake un cautivador trabajo que disfrutaremos de principio a fin, y al que, venciendo algunas reticencias, se puede acercar cualquier amante de la psicodelia sesentera.

Personal :

Steve Marriot : Guitars, Vocals.
Ronnie Lane : Bass, Vocals.
Kenney Jones : Drums, Percussion.
Ian Mclagan : Keyboards.

J. GEILS BAND - LIVE BLOW YOUR FACE OUT (1.976)

 

El álbum que os acerco hoy pertenece a ese grupo de discos que tienen para mí un importante valor sentimental, pues forma parte junto a otros de aquel puñado de vinilos con los que más me despendolaba en las fiestas que organizabamos en mis años de adolescencia, entre los que abundaban aquellos en los que se podían escuchar buenos temas de ritmo visceral bastante sudoroso de esos que te dejan bastante agotado, y que hacían que retorciéramos nuestro cuerpo de forma espasmódica sobre la pista. Y este Live Blow Your Face Out de los bostonianos J. Geils Band fue uno de los discos que más adrenalina nos suministró a mí y a mis colegas en esas sudorosas fiestas con sus agitados, intensos y rockeros temas que emanaban un feeling soulero muy especial. Vale, lo reconozco en esa época estos temas me ponían muy excitado... en realidad sigo sintiendo cierta debilidad por ellos.

Pero este directo es mucho más que unos cuantos temas para fiestas sudorosas, por encima de todo es un fenomenal, mágico y enérgico disco de rock, en el que pese a ser patentes las influencias, soul y rhythm & blues, el merito de la banda estriba en darle a ese sonido su toque personal, sin perder ni por un instante su identidad y actitud rock.

Este poderoso Live Blow Your Face Out sigue siendo unos de esos discos que vuelvo a recuperar con asiduidad ( esta mañana lo he estado recuperando tras bastante tiempo ), y para mi gusto, consideraciones sentimentales aparte, me sigue pareciendo uno de los mejores discos de esta vigorosa banda. Y aún sigo escuchando con la misma admiración y emoción temas tan calientes como el rhytm & blues Back To Get Ya en el que destaca una descomunal armónica de Magic Dick tocada con mucho carácter. O las desatadas versiones que hacen de clásicos como Where Did Our Love Go, de las Supremes, en la que combinan con maestría el soul clásico con el sonido más rockero, en el instrumental Sno-Cone del bluesman Albert Collins, o en Raise Your Hand de Eddie Floyd, tres excelentes temas de los que te impiden tener los pies quietos. Las querencias más country llegan con la desbocada Truck Drivin' Man, uno de esos temas que te dan buen rollo y te hacen salir a la pista con una sonrisa. Pero donde verdaderamente están desatados es en temas como Love-Itis, en el que destaca una instrumentación furiosa y poco complaciente, en (Ain't Nothin' But A) Houseparty, o en Detroit Breakdown en los que de nuevo Magic Dick pone su toque personal con la armónica. Cualquiera de los temas que conforman este fantástico directo de 1.976 vale el disco por si solo, sin embargo en lo que a mi respecta hay dos de ellos que se encuentran entre mis favoritos, Give It To Me, que me enganchó instantáneamente con su ritmo hipnótico y su pegadizo estribillo que te invita a cantar a todo pulmón. Y por encima de todas está la irresistible y demoledora Chimes, que es toda una gozada y que es una de esas canciones que siempre tengo ganas de escuchar a pleno rendimiento de mis altavoces, porque me pone en órbita automaticamente. Un apabullante tema de más de ocho minutos que nos devuelve al genuino sonido Detroit, con unos solos estremecedores de armónica, guitarra y hammond que son una incomensurable locura. ... Simplemente brutal, pura dinamita sónica ...

El resultado final es un enorme directo la mar de disfrutable, pues la vigencia y energía de su sonido creo que sigue siendo plena a día de hoy. Y gracias a él empecé a valorar a esta fantástica banda, a la que antes no les había prestado ninguna atención. Cosa que remedié a partir de ese instante porque son un grandísimo grupo y en directo suenan como un cañón. 

Personal :

Peter Wolf : Vocals.
Seth Justman : Keyboards, Vocals.
J. Geils : Guitars.
Magic Dick : Harp.
Danny Klein : Bass.
Stephen Jo Bladd : Drums, Vocals.

THE WHO - WHO'S NEXT (1.971)

 

Who's Next es toda una barbaridad sónica, y constituye para mí la mejor y más completa obra de los turbulentos The Who y por supuesto una de las obras cumbres del rock. Si señor, este álbum es demasiado bueno como para ser simplemente uno más. Porque no se puede decir otra cosa de un pedazo de disco en el que la peor canción sigue siendo un temazo mayúsculo, en el que sus temas desprenden una fuerza y vitalidad que resultan contagiosas, donde los riffs y solos de guitarra son completamente orgásmicos capaces de hacerte botar y cantar enardecido ( escucha Won't Get Fooled Again y entenderás lo que quiero decir, está fue la primera canción que se me quedó marcada a fuego en la sesera ). Y es que la magia que emanan todas y cada una de las canciones de este disco es sublime en todos los sentidos, con un Roger Daltrey en su máxima plenitud regalándonos momentos vocales increíbles, llenos de emotividad y jugando a su antojo con sus cuerdas vocales. Y un Pete Townshend legándonos unos implacables riffs para el recuerdo demostrando su enorme calidad, unida al de un enérgico Keith Moon que se reivindica a base de increibles golpes de baqueta que son todo un prodigio. Y con un impecable John Entwistle que nos demuestra toda su grandeza a la sombra de unos auténticos genios.

La gran calidad de las canciones, así como la sabia combinación en el orden de las mismas hace que la escucha del disco de un solo tirón resulte toda una experiencia cautivadora y se haga sorprendentemente corta, además de ser todo un disfrute para nuestros castigado oídos. Entre sus canciones nos encontramos contundentes piezas que derrochan magnetismo por los cuatro costados, donde los marcados riffs de Pete Townshend adquieren de repente una agresividad incontrolada como en la sobresaliente My Wife, uno de esos temas que siempre escucho embelesado por la majestuosidad de los arreglos de viento, o en la portentosa Bargain. Junto a otras de sonido más acústico como la preciosa Going Mobile, con un portentoso Keith Moon a las baquetas, la deliciosa Love Ain't For Keeping, o la emotiva Behind Blue Eyes, una de las canciones más hermosas que mis oídos hayan podido escuchar jamás. También podemos deleitarnos con otras partes más melódicas y sugerentes que están plasmadas en The Song Is Over y en la coral Gettin In Tune, donde nos atrapan con una gran armonía vocal. Sin embargo resulta imposible no reconocer la grandeza que hay en canciones como la inicial Baba O'Riley y el increíble deleite que hay en su escucha, con un inicio hipnótico de sintetizadores. Y en la sublime obra maestra que es Won't Get Fooled Again, la canción que me empujo a adorar este disco y que me tuvo atrapado días y días sin poder hacer otra cosas que escucharla una y otra vez sin parar y a todo trapo por mis altavoces, porque resulta toda una explosión de sonido auténticamente abrasivo, donde destacan unos aguerridos riffs de guitarra que son una auténtica locura y un desgarrador grito por parte de Roger Daltrey de esos que te ponen el vello como escarpias. ... Una contundente catarsis guitarrera para cerrar de forma sublime esta descomunal obra de arte digna de ser escuchada ...

Un trabajo esencial que está a la altura de muy pocos, y que con el tiempo se convertiría en uno de los discos más influyentes y aclamados de la historia del rock.

Personal :

Pete Townshend : Guitars, Piano, Synthesiser, Vocals.
Roger Daltrey : Vocals.
John Entwistle . Bass, Brass, Piano, Vocals.
Keith Moon : Drums, Percussion.

BE-BOP DELUXE - AXE VICTIM (1.974)

 

Hay álbumes que requieren que quien se ponga ante ellos a degustarlos se tome algo de tiempo y ponga en ello los cinco sentidos. Simplemente contienen tanta riqueza sónica que no pueden ser escuchados de forma diferente. Porque la escucha pausada nos hace disfrutar de cada pequeño detalle que en él se haye. Y además el pequeño disfrute te hace elevar del suelo que pisas gracias a la enorme belleza que desprenden. Y en lo que a mí concierne este Axe Victim de los británicos Be-Bop Deluxe es uno de esos trabajos que sencillamente te elevan el espiritu.

Con este álbum debut me inicié en la carrera de esta fascinante banda. Un disco que me cautivo al instante, que está formado por un sólido además de variado conjunto de canciones, en el que se fusiona de forma maravillosa el glam, el pop elegante y el rock de tintes guitarreros, para dar lugar a una obra realmente sorprendente. Toda una gozosa locura en la que el sentimiento glam campa a sus anchas por cada uno de sus magistrales cortes. Que por momentos nos hace volar hasta alcanzar dimensiones cósmicas gracias a temas como la irresistible Adventures In A Yorkshire Landscape, una alucinante y atmosférica pieza repleta de magia, la pausada y melódica Night Creatures o la adorable Jets At Dawn, tres excelsos temas donde la subyugante belleza de sus melodías nos hace sentirnos en las nubes. Y donde el vuelo alcanza ya dimensiones estratosféricas es en la incendiaria Trains To Heaven, un rock guitarrero de creciente tensión instrumental que termina desembocando en toda una desgarradora explosión sónica. También tenemos perlas de cierta sonoridad rocanrolera como la luminosa Rocket Cathedrals. Los tintes de querencia más glam los encontramos en la placentera Axe Victim, una soberbia y hermosa pieza. En la enorme Love Is Swift Arrows. O en la elegante Jet Silver And The Dolls Of Venus. Estos últimos fueron los temas que más me chocaron en un principio ya que el glam no era lo mío, y a los que más me costó acostumbrarme en las primeras escuchas, sin embargo, os aseguro que a medida que os metéis de lleno en los mismos terminan por ser los que más satisfacción sonora llegan a producir.

Un álbum sin desperdicio que es todo un dulce disfrute, con unos ambientes de una elegancia y una clase que solo unos pocos privilegiados como su líder Bill Nelson pueden desarrollar en su cabeza. Y es que cuando uno escucha discos como este Axe Victims solo se puede pensar que esas palabras fueron inventadas para aplicárselas a bandas como esta.

Personal :

Bill Nelson : Vocals, Guitars, Piano.
Ian Parkin : Guitars.
Robert Bryan : Bass, Vocals.
Nicholas Chatterton-Dew : Drums, Percussion.

THE DEVIANTS - PTOOFF ! (1.969)

 

Gracias a este blog que he inaugurado hace poco estoy recuperando música que hacía años que no escuchaba. Y hoy lo hago con los londinenses The Deviants y su álbum debut Ptooff ! que grabaron en 1.967. Banda que estaba liderada por el escritor y periodista de orientación anarquista Mike Farren y que fueron una de las primeras agrupaciones que se salieron de los esquemas más hippies que adornaban a la mayoría de las bandas de la época, para adentrarse en una sonoridad de actitud mucho más anárquica que les hacía rebelarse contra todo.

Lo que más me impacto en un primer momento de este trabajo, fue la fuerza y actitud degenerada que transmitía la banda en alguno de sus temas de onda más proto-punk. Creo que el primer tema que escuché de ellos fue I'm Coming Home que venía en una cinta que me grabó un colega y que contenía unas cuantas bandas de onda underground de los años 60,s entre las que se encontraba The Deviants ... y que me dejó auténticamente noqueado ...

Y en cuanto escuché ese delirante tema supe que esa banda se merecía una oportunidad y ese disco terminaría formando parte de mi cofre musical. Y resultó que ese tema era solo la punta del iceberg, y que lo mejor estaba aguardándome entre los surcos de ese impactante vinilo. Porque en él nos encontramos unos temas que nos sumergen en el underground más oscuro y anárquico de la escena británica sesentera. Un debut que recorre varios terrenos todos ellos repletos de paisajes sonoros bastante inquietantes, en los que la rabia, y la angustia se van apoderando de tí poco a poco. Pero no todo es anárquica oscuridad en este álbum, porque temas como Child Of The Sky o el remanso de paz que es el instrumental Bun me sumergen en un estado de agradable nostalgia o de ensoñación placentera. Aunque las texturas rhytm & blues de Charlie la hacen ser simplemente una de mis favoritas, una de esas canciones que te van arrastrando poco a poco con sus arrebatadoras guitarras que se suceden ordenadamente durante toda la canción. Cambiándo bruscamente hacia los pasajes más desoladores nos adentramos en Nothing Man donde se vislumbran ciertas dosis de experimentación sonora y en la tremenda sonoridad de Deviation Street, que está repleta de un desgarrador caos sónico y en la que su líder y vocalista Mick Farren nos vá recitando su quejumbroso lamento. Pero la que aún me sigue erizando el vello es la desbordante I'm Coming Home, me encanta esa feroz anarquía guitarrera y la desasosegante voz de Mick Farren que parece todo un descarnado lamento. ... Me tiene atrapado ...

Un disco donde se complementan maravillosamente la furia y la calma, la claridad y la oscuridad.  ... En definitiva pasión y vida ...

Posteriormente dos de sus miembros formarían parte de los Pink Fairies, pero eso es parte de otra historia, porque más adelante le dedicaré la entrada que se merece a su álbum debut de 1.971 Never Never Land. que es una auténtica zapada sónica.

Personal :

Mick Farren : Vocals, Piano.
Sid Bishop : Guitars, Sitar.
Cord Rees : Bass.
Russell Hunter : Drums, Vocals.
Duncan Sanderson, Stephen Sparkers, Ashworth : Vocals.

FLAMIN GROOVIES - SUPERNAZZ (1.969)

 

Hoy tengo ganas de rockear un poco, así que he echado mano del álbum Supernazz de los californianos Flamin Groovies y he rescatado alguna de sus piezas para que pasen en estos momentos por mis alicaidos altavoces. Una banda a la que en su día no le presté mucha atención, era una etapa en la que aún no le tenía cogido el gusto a este tipo de música, había escuchado por la radio alguna de sus canciones y me parecían una buena banda de rock, pero tampoco me interesaron hasta el punto de comprarme uno de sus discos, se me atragantaban un poco este tipo de bandas. Hasta que un día en una de mis tiendas habituales tenían en el escaparate entre otras, una portada de este disco de los Flamin Groovies que me pareció alucinante, esa portada de Bob Zoell que rememora los Cartoons de los 50,s me cautivó y fue la disculpa perfecta para hacerme con el disco. ... A partir de ahí es un disco que lo he disfrutado muchísimo y me ha acompañado en muchas fiestas ¡ que tiempos esos !...

Desde el primer momento me encantó ese sonido rockanrolero que se gastaban, y esas canciones que invitan a movernos, a bailar y por supuesto a sudar como un cerdo. Me pareció un disco tremebundo, esas guitarras que sonaban limpias y tensas me apasionaban, y encima está repleto de canciones dinámicas de esas que levantan a un muerto. Porque quién se puede resistir a esos estallidos de puro rockabilly que son todo un puntazo, como la inicial Love Have Mercy o Bam Balam, irresistibles temas de esos que te producen un subidón de adrenalina. Y que decir de las pequeñas píldoras de atmósferas rhytm & blues como la potente The First Ones Free, la sugerente Laurie Did It, o la magistral Around The Corner, pues que son una excelente muestra de su energía y buen rollo. Tampoco se olvidan de recrear algunos clásicos que son toda una gozada como The Girl Can't Hel It de Little Richard, Rockin' Pneumonia And The Boogie Woogie Flu de Huey "Piano" Smith, o Sometin Else de Eddie Cochran, que los bordan de forma sobrada y son pura dinamita sónica. El disco contiene otros temas sobresalientes de vena más melódica como A Part From That o la hermosa Pagan Rachel. ... Al contrario de lo que a veces nos pasa con algunos discos, que se nos hace difícil escucharlos de un tirón, este disco de los Flamin Groovies con toda su intensidad rockanrolera, te atrapa una vez que estás dentro de él ...

Un álbum que cuanto más lo escucho más me gusta, con unos temas capaces de poner patas arriba cualquier fiesta en pleno declive.

Personal :

Cyril Jordan : Guitars, Vocals.
Roy A. Loney : Guitars, Vocals.
Tim Lynch : Guitars, Vocals, Harmonica.
George Alexander : Bass, Vocals, Harmonica.
Danny Mihm : Drums, Percussion.
Mike Lang : Keyboards.

STATUS QUO - STATUS + QUO + LIVE ! ( BOX-SET 4 CDS 2.014)

 

El Live ! de 1.977 fue el primer disco de los Status Quo que me compré, hace ya demasiados años. No se porqué elegí este disco para estrenarme. Conocía alguno de sus singles de álbumes anteriores como era el caso de Gerdundula, Caroline o Down Down. Pero recordaba haber leído en el Disco Express ( revista de cabecera de esos años para mí ) un articulo sobre este álbum en directo en el que salia muy bien parado, definiéndolo como uno de sus mejores trabajos. Y el caso es que este fue mi disco elegido para iniciarme seriamente en estos genios del doble punteo, y creo que no pude haber elegido mejor, lo sentí en el momento de pincharlo la primera vez, y lo siento a día de hoy. He comprado algunos discos más de Status Quo desde entonces, pero este sigue siendo mi favorito y para mi gusto creo que debe figurar entre los mejores de su extensa discografia. Y ya cuando han lanzado en el 2.014 la edición deluxe de este disco conteniendo 4 cds. con la inclusión de  otros dos conciertos más, el Tokyo Quo de la gira nipona del 76, y el Australia '74' que se grabó en Sydney. Pues no me he podido resistir a la tentación de hincarle el diente a esta deliciosa golosina y a caído en mis redes. ... Una auténtica bomba rockera ... Y que recuerdos madre mía. Y que canciones, algunas de las cuales hacía años que no escuchaba.

Status Quo son una auténtica máquina de rockear sin complejos, y buena prueba de ello lo tenemos en esta maravillosa Box-Set. De la que me gustan por supuesto todos y cada uno de los temas que contiene esta auténtica joyita. Como sucede con todos los buenos artefactos, lo que más he disfrutado en las primeras escuchas han sido los temas que para mí eran más poderosos y pegadizos de toque boogie-rock sudoroso. Canciones como la aguerrida It's There Better Way, la festiva Caroline, o la correosa Rain, me parecían entonces, y me siguen pareciendo ahora, muy disfrutables gracias a esos riffs tan pegadizos que se gastan estos condenados. Temas de demoledora potencia como Backwater-Just Take Me o Don't Waste My Time, son pura diversión a primera escucha. La temperatura también sube con las tremendas e imprescindibles Roll Over Lay Down, la aguerrida Big Fat Mama o la festiva Bye Bye Johnny, en las que nos castigan lo oídos de forma inmisericorde con sus pegajosos y contundentes riffs. Pero en medio de esta gran colección de canciones sudorosas destacan dos joyas por encima de todas, ese inmenso himno que es el Roadhouse Blues de los míticos Doors, que en manos de estos depravados es pura bestialidad, y la extensa y agresiva Forty-Five Hundred Times, en la que en sus más de dieciséis minutos hacen todo un despliegue guitarrero sin contemplaciones y con mucho feeling. ... Esto si que es auténtico Boogie-Rock sin parafernalias, tocado con mucho oficio y en plan apisonadora sónica ...

Aunque nunca fueron unos superclase, si fueron una excelente banda de boogie-rock sin concesiones, de las que hacen sentirte lleno de vida. Y esta inmensa Box-Set es una buena ocasión para acercarse a esta divertida banda cuando estaban en su mejor momento demostrando contundencia sónica a tope. ... Denles una oportunidad porque no se arrepentirán ... 

Personal :

Francis Rossi : Guitars, Vocals.
Rick Parfitt : Guitars, Vocals.
Alan Lancaster : Bass, Vocals.
John Coghlan : Drums.

WISHBONE ASH - ARGUS (1.972)

 

A mediados de los setenta estaba descubriendo verdaderamente la música y viviendo como nunca la pasión por el rock'n'roll. Fue una época en la que me gastaba todos mis ahorros en comprarme discos a cascoporro, cuando aparecía por alguna tienda me gustaba llevarme un poco por la intuición, mi instinto no me solía fallar, aunque también solía llevarme algunas desilusiones. Y en una de esas excursiones en busca de joyas desconocidas dí con una banda de la que no sabía nada de nada, pero que en un primer momento me atrajo por esa propuesta tan atractiva que hacían al llevar dos guitarras en su formación, y a los que me enganché rápidamente, se trata de los británicos Wishbone Ash, y ese álbum del que me enamoré instantáneamente fue Argus.

Y hoy me apetece recuperar este Argus que grabaron en 1.972, porque es uno de esos discos de los que nunca quiero olvidarme, y que sin pensármelo ni un segundo sería uno de los primeros que engrosarían el cofre de las joyas musicales que me llevaría a cualquier isla desierta. Porque me parece uno de esos álbumes que en su conjunto son toda una lección de rock de melodías y guitarras sublimes, una excelente combinación a la que nunca me he podido resistir. Ya me engancharon desde el principio cuando empezaron a sonar por mis altavoces los primeros acordes de Time Was, esa pequeña introducción de guitarras acústicas con sus cálidas armonías vocales me parecieron sublimes, y ya cuando se desatan con ese desarrollo guitarrero tan descomunal en su parte final fue todo un éxtasis ! me quedé sin palabras ante tanta belleza sónica ¡. En la misma onda se situaba la hermosisima y muy delicada Sometime World, un tema precioso repleto de una belleza melódica irresistible, en esos momentos me encontraba como en una nube, era pura delicatessen guitarrera. A partir de aquí ya me tenían atrapado en sus delicadas redes sónicas. Y ya fue aparecer por mis altavoces la introducción de Blowin Free y fue todo un orgasmo, Wishbone Ash en estado puro, era pura magia guitarrera ¡ como podía resistirse alguien a ese doble punteo !. Y la cosa no se quedaría ahí, porque fue darle la vuelta al disco y empezar a sobrevolar por mi habitación King Will Come, con esas guitarras tan engañosamente frágiles y delicadas de inicio, porque a mitad de tema se vuelven rabiosas convirtiéndose en absolutas protagonistas y a partir de ahí ya me sentí atrapado por completo. La pausada y deliciosa folky Leaf And Stream nos da un pequeño respiro, uno de esos temas que te dan algo de paz. Las canciones ásperas y envolventes llegan con Warrior y Trown Down The Sword, dos momentos tremendos de auténtico rock armonioso combinados de manera explosiva y magistral, que ponen punto final a esta auténtica obra de arte.

Pocas veces he tenido la sensación que tuve con este disco y esta banda, como de estar asistiendo al nacimiento de algo muy grande, y de sentirme una especie de privilegiado por haberme percatado desde el comienzo de estar ante uno de los discos de mi vida. Y de una banda que a partir de aquí siempre me ha acompañado. ... Bueno, estaba ante una banda que ahora ya es para mí, simplemente, leyenda ...

Personal :

Andy Powell : Guitars, Vocals.
Ted Turner : Guitars, Vocals.
Martin Turner : Vocals, Bass.
Steve Upton : Drums.

 

THE 13 TH. FLOOR ELEVATORS - THE PSYCHEDELIC SOUNDS OF THE FLOOR ELEVATORS (1.966)

 

Ultimamente estoy teniendo una etapa en la que estoy volviendo a escuchar de nuevo psych-rock a todas horas, y por eso estoy repescando discos y bandas que tenía demasiado olvidados. Y uno de ellos ha sido este interesante disco titulado The Psychedelic Sounds Of The Floor Elevators de una de las bandas pioneras del psych-rock llamada 13 Th. Floor Elevators. Su álbum debut es un disco extraño a oídos poco entrenados en el género ( cómo fue mi caso en una primera escucha ), está a medio camino entre el garage más sucio y descuidado y la psicodelia más ácida. ¡ Vamos !  toda una esquizofrénica delicia psicodélica que alcanza un nivel de lisergia sonora descomunal adornado de tonos garageros. En el que todo encaja de forma perfecta, la aullante voz de Roky Erickson, el inconfundible estilo de Stacy Sutherland a la guitarra y los extraños sonidos de electrig jug de Tommy Hall, dando como resultado unos paisajes ácidos totalmente adictivos.

Formados en la ciudad de Austin ( Texas ) en 1.965 y que se disolvieron en 1.969, fueron de las primera bandas en crear una música que reflejara de alguna forma las percepciones experimentadas bajo los efectos de sustancias psicotropicas como el LSD, pero también fueron considerados como uno de los grupos pioneros del psych-rock que hicieron explosión a mediados de los 60,s.

The Psychedelic Sounds Of The Floor Elevators no se si porque es el disco con el que yo les descubrí o simplemente porque es un excitante disco, el caso es que es mi favorito. Los temas son soberbios desde la primera You're Gonna Miss Me, con una atmósfera rabiosa y pegajosa, pasando por la psicótica Fire Engine, tema enloquecido como pocos, el hipnótico y obsesivo blues Thru The Rhythm, y llegando a la majestuosa balada Splash I, el único tema delicado que nos deja este degenerado disco. Y junto a todas estas buenas canciones están, por lo menos para mí, las dos mejores canciones del disco y de las mejores de la carrera de esta fantástica banda. Una es Reverberation ( Doubt ), extraordinario tema de una crudeza sónica brutal. La otra es la adictiva y sucia Roller Coaster, un temazo de esos que no puedes dejar de escuchar una y otra vez. ... Excelentes temas que hacen de este debut un imprescindible del psych-rock para su disfrute colectivo ...

A quien le guste el psych-rock más crudo de los 60,s les tiene que hacer gozar esta banda por su incuestionable y capital importancia para el género. ... Un disco clave dentro del sonido lisérgico americano, que es toda una explosión de sonido abrumador a la que solo puedes rendirte y adorar ...

Personal :

Roky Erickson : Vocals, Guitars.
Stacy Sutherland : Guitars.
Ronnie Leatherman : Bass.
Benny Thurman : Bass.
John Ike Walton : Drums, Percussion.
Tommy Hall : Electric Jug.

GENTLE GIANT - CINCO CANCIONES QUE ME VOLARON LA CABEZA

 

Aunque con algo de retraso quiero rendir mi pequeño homenaje a uno de los grupos más inconfundibles del progresivo setentero como fueron los británicos Gentle Giant, una sugerente banda liderada por los hermanos Shulman, que fue capaz de deleitarnos con maravillosos discos que nunca superaron el listón comercial, pero que rubricaron para la historia un legado sin parangón, que les sitúa en una categoría reservada solo a los grandes. Excelentes trabajos de los que te dejan muy buen cuerpo después de su escucha, y que son ideales para desconectar en busca de tranquilidad.

Gentle Giant está compuesto por un elenco de instrumentistas de enorme calidad, capaces de combinar una ingente cantidad de instrumentos con los que imprimen una impresionante sonoridad a sus canciones de texturas complejas pero a la vez atractivas. Aunque donde te atrapan como pocas es con su descomunal juego de voces que te dejan sin palabras, con algunos temas en los que se explayan a gusto para dejarnos constancia de su incomparable genialidad.

Así que voy a darle un repaso a las que denomino top five que más me volaron la cabeza.

Y nada mejor que empezar a navegar con la impresionante Funny Ways de su primer álbum Gentle Giant que grabaron en 1.970. Un tema de gran belleza lírica que te atrapa como pocas, en el que nos hacen entrar en otra dimensión con esos arreglos de cello y violín propios de un cuarteto de cámara que conviven en perfecta armonía con unas voces que resultan deliciosas al oído. 

Si su primer trabajo fue una grata y alucinante sorpresa para mí, que decir de su quinto trabajo el maravilloso In A Glass House de 1.973, pues que me hipnotizó por momentos. De este rescato dos soberbios temas en los que están pletóricos instrumentalmente. El primero es Way Of Life, un medio tiempo bien trabajado que va ganando en intensidad con una atronadora base rítmica.

El siguiente que recupero es la homónima In A Glass House con la que cierran el álbum. Un tema en el que recuperan un tono más rockero, realizando auténticas acrobacias sónicas con sus instrumentos, deparándonos uno de los momentos más rítmicos y poderosos de su carrera.

Ahora nos mudamos a su séptimo álbum, el más accesible Free Hand de 1.975 y recupero el buen gusto con otras dos auténticas obras de arte. La primera es la descomunal On Reflection, que es el tema que eclipsa todo el álbum, en el que de nuevo la avalancha de voces tienen especial protagonismo, están bien ensambladas con buen gusto y sensatez, haciendo todo un alarde de auténtico lirismo, y con un final poderoso y rítmico. ¡ no se si es mi preferida pero una de ellas seguro !.

Y para concluir este mágico repaso, me voy a otro momento de atmósfera plácida de su álbum Free Hand con la sugerente delicadeza de His Last Voyage. Un tema en el que la banda nos deleita con unas fascinantes armonías vocales y una delicada y atractiva instrumentación.

 
Un maravilloso grupo con una concepción musical algo compleja en una primera escucha, pero cuando aparquéis los bostezos los que no sois seguidores del progresivo, seguro que os cautivarán con su sinfín de recursos instrumentales que provocan asombro incluso en la actualidad, su dominio instrumental apabulla y sus delirantes juegos vocales hipnotizan y sorprenden. ... Así que no tengáis ningún reparo en llevároslos a los oídos, porque seguro que harán las delicias de las orejas más exigentes...  ... A mí hoy ya me han alegrado el día con este regalazo que me he dado ...

Personal :

Derek Shulman : Vocals, Bass.
Ray Shulman : Bass, Violin, Guitar, Percussion, Vocals.
Phil Shulman : Sax, Trumpet, Vocals.
Kerry Minnear : Keyboards, Cello, Percussion, Vocals.
Gary Green : Guitars, Flute, Vocals.
John Weathers : Drums, Tambourine, Cymbals.

BLACK SABBATH - SABBATH BLOODY SABBATH (1.973)

 

Cuando me toca desempolvar alguna de esas bandas que fueron referencia, favoritas o de cabecera en mi etapa juvenil, instintivamente mi subconsciente me lleva directamente a las islas británicas recordando a tres auténticas leyendas que me marcaron sobremanera Deep Purple, Black Sabbath y Uriah Heep. Bandas por las que siempre he sentido especial afinidad ya que fueron las que primero me atraparon con sus descargas sónicas. Y puestos a elegir dentro de este excelente trio para traerlos a esta entrada me decanto por los memorables Black Sabbath y ¡ sorpresa ! porque he escogido su quinto álbum de 1.973 Sabbath Bloody Sabbath, que me sirve como excelente recuerdo de su década dorada.

Aunque escuchar cualquiera de sus primeros y emblemáticos álbumes es todo un éxtasis, me he decantado por este Sabbath Bloody Sabbath porque para mí este es toda una gozada de principio a fin, con esto no quiero decir que los demás no lo sean, incluso los dos primeros puede que sean superiores, pero este me parece de los más completos y de los que más me impactaron en su tiempo. Y a día de hoy me sigue pareciendo una brillante joya musical e incuestionable en cualquier colección musical de hard-rock setentero.

En una etapa donde la banda parecía pasar por uno de los peridos más fructiferos y de gran nivel compositivo, como demostraron en sus cuatro anteriores trabajos, pondrían el broche de oro con este Sabbath Bloody Sabbath siguiendo la misma estela pero dando otro pequeño salto de calidad con relación a lo anteriormente hecho, apoyándose en los sonidos de hard-rock tan característicos de la banda, pero con un cierto toque de madurez interpretativa. Donde Ozzy Osbourne sigue con su impresionante registro vocal y con un Tony Iommi que hace saltar todas las alarmas con sus maravillas guitarreras rebosando intensidad y con sus potentes riffs por doquier. Por otra parte la pareja rítmica tampoco se queda atrás porque Bill Ward revienta sus bombos como pocos y Geezer Butler está increíble y con mucho peso en el sonido de la banda.

En general me gusta todo de este álbum, desde la portada que me parece genial y provocadora ( aún conservo una edición en vinilo con la portada censurada ) hasta sus entrañas. Y es que este álbum tiene uno de esos comienzos de leyenda a tope poderoso como a un servidor le gusta con la melódica Sabbath Bloody Sabbath y su crudo riff de guitarra que va ganando enteros con esa guitarra revoloteando obsesivamente sobre tu cabeza taladrandotela sin compasión. La locura sigue con A National Acrobat, un tema que suena inesperadamente cautivador y tiene un algo especial que sin saber exactamente bien como describirlo me atrae sobremanera. Después de una bajada de intensidad con el delicioso instrumental Fluff, otra alta dosis de electricidad y calidad llega con Sabbra Cadabra, de nuevo con unos de esos riffs endemoniados que no te puedes quitar de la cabeza ( y en el que colabora el teclista Rick Wakeman ). Pero joder, es escuchar Killing Yourself To Live y su aplastante riff sobrevolando sobre mi cabeza y me dejan atónito, siempre he estado fanáticamente enganchado a este tema. Otro de los temas que calaron en mí desde un principio fue Looking For Today, me encanta esa sonoridad tan melódica que tiene que está repleta de belleza y su pegadizo estribillo. En Spiral Architect también están enormes con esos fantásticos arreglos orquestales. Quizás la única pega que le ponga es a la lunática Who Are You, que me parece toda una excentricidad y le sobra, no me dice nada. ... Pero se les perdona la " ida de hoya " porque el resto es de sobresaliente ...

No me cansaría de escuchar este disco nunca, ni poniéndolo todos los días, porque me parece una de sus grandes obras que recomiendo encarecidamente porque es toda una gozada.

Personal :

Ozzy Osbourne : Vocals.
Tony Iommi : Guitars.
Geezer Butler : Bass.
Bill Ward : Drums.

 

MANFRED MANN'S EARTH BAND - NIGHTINGALES AND BOMBERS (1.975)

 

Los Manfred Mann's Earth Band por fin reciben el tributo que se merecen en estos Mares del rock. Y lo voy a hacer con uno de sus grandes trabajos de mediados de los 70,s, el maravilloso Nightingales And Bombers que registraron en 1.975. Un trabajo sugerente que se convirtió en todo un logro en la dilatada carrera de este músico sudafricano, y al que me declaro hipnotizado desde la primera escucha. En el que suenan como lo que son, una grandisima banda, una banda de rock-progresivo que nos factura un disco de sólida composición y que desprende mucha energía a lo largo de los ocho temas que componen el álbum.

Nightingales And Bombers supone un paso adelante en los sonidos más prog. de la banda. Una senda que ya fueron dejando latentes desde su maravilloso y notable Solar Fire de 1.973. Este es un álbum de vertiente más prog. si cabe, pero manteniendo la frescura y originalidad de sus primeros trabajos con este proyecto. Y que para mi gusto, sería el álbum que les situaría en la cima de la escena progresiva setentera.

El inicio del álbum nos trae la esencia más pura de Manfred Mann en sus últimos años que son las revisiones de temas clásicos, en esta ocasión se descuelgan con dos, el primero es una insuperable versión de Bruce Springsteen, y su tema Spirits In The Night, que es la joya de la corona, en la que la expresiva voz del australiano Mick Rogers se mueve entre una sugerente y cristalina base instrumental, todo ello bien tejido por unos deliciosos teclados que crean una atmósfera mágica muy bien adornada por unos despampanantes arreglos de cuerda y coros ¡ pura fantasía sónica !. El otro es la majestuosa Visionay Mountains de la británica Joan Armatrading, un tema de atmósfera suave y elegante de los que te van calando hasta dejarte absorto, que está adornado de una sublime sonoridad melódica en la que destacan unos cautivadores solos que harán las delicias del oyente. Otros de los temas facilmente reconocibles de la banda y que son los que le imprimen carácter a sus discos, son los dinámicos instrumentales de sonido directo, en esta ocasión nos encontramos con varios, aunque yo destacaría dos que son descomunales, la más rockera Countdown, y la más jazzy Crossfade, dos temas de alto voltaje sónico repletos de cortantes cambios de ritmo y poderosa instrumentación, donde acaparan todo el protagonismo Mick Rogers con una espectacular guitarra y Manfred Mann con sus exuberantes teclados. Otro de los momentos álgidos llega con la hipnótica y elegante Time Is Right, uno de esos temas con duende, repleto de matices y atmósferas que te atraparan en su telaraña de influencias progresivas que desembocan en una espiral de fuerza sónica. ... Estos temas son los que me hacen creer ciegamente en este Nightingales And Bombers como uno de los más excitantes trabajos de Manfred Mann's Earth Band en su etapa setentera... 

Una joya de disco, ideal para escucharlo detenidamente tumbado en el sofá acompañado de unos buenos cascos y a buen volumen. La experiencia será gratificante y única. ¡ experimentarla que no os arrepentiréis !.

Personal :

Manfred Mann : Keyboards.
Mick Rogers : Vocals, Guitars.
Chris Slade : Drums.
Colin Pattenden : Bass.

 

GRAND FUNK - LIVE THE 1971 TOUR (2.002)

 

Ya tenía ganas de hincarle el diente a este incendiario Live The 1.971 Tour que conseguí hace poco tiempo en una tienda de segunda mano del centro de Madrid, de una de las bandas referentes del rock poderoso americano, como era el trio de Flint ( Michigan ), los inconmensurables Grand Funk. Siempre me gustaron sus discos en estudio desde aquel primer álbum de 1.969, el homónimo Grand Funk. Disfrutaba con sus canciones repletas de momentos intensos y rabiosos. Pero donde estos tíos eran auténticos bestiajos, eran en sus directos que eran donde se encontraban en su salsa, desplegando unos efectivos shows rebosantes de poderosa energía. 

Pocos grupos de hard rock gozaron de tanta aceptación en su país como lo hicieron los Grand Funk durante la década de los 70,s, vendiendo más álbumes que cualquier banda americana del género desarrollando su propio estilo musical. Y es que fueron unos gigantes del rock más crudo con su enérgico y arrollador hard-rock de tintes soul. Sus temas iban directos a la yugular ya que no dejaban espacio para el respiro. Actitud rockanrolera no les faltaba, y este Live The 1.971 Tour es una buena muestra de ello. El disco recoge parte de los conciertos de la gira de presentación de su álbum E Pluribus Funk, que dieron durante los meses de abril y julio de 1.971 en las ciudades de Detroit, Chicago y Nueva York.

Así que sube el volumen de tu equipo y disfruta de una buena dosis de hard-rock sudoroso. Ya que comienzan a todo trapo con la directa Are You Ready, un tema cargado de energía. A partir de aquí la arrolladora lata sónica se abre y nos podemos encontrar temas tan incendiarios como la soulera Footstompin' Music, un tema muy rítmico y con una buena dosis de pegajoso Hammond. Y sin tiempo de poder quitarnos el sudor de nuestro cuerpo nos vuelven a pegar con mas fuerza si cabe con la intensa Paranoid, donde Mark Farner nos machaca el cerebro con un atronador riff final. A partir de aquí bajan un poco el pistón y nos dan una pequeña tregua sónica con I'm Your Captain/Closer To Home, con su pegadizo estribillo. Pero la intensidad vuelve a subir con las enlazadas Hooked On Love y Get It Together, este último de nuevo con un pegajoso Hammond. A partir de aquí entramos en los momentos más estelares que nos depara el álbum con las incendiarias T.N.U.C. donde la palma se la lleva un abrasivo y mastodóntico solo de batería por parte de Don Brewer, que era requisito indispensable en cualquier buen concierto de rock de esa época. Y la rabiosa Inside Looking Out, con esa orgía instrumental final con un Mark Farner que se explaya con la guitarra en plan estelar. Ahora es momento para la versión con el clásico Rollingstoniano Gimme Shelter, en el que aquí le dan una vuelta de tuerca al original y nos presentan una incendiaria revisión. Y como cierre del show otro clásico que nos llevamos a la boca con la tremenda Into The Sun, un tema para disfrutar porque es todo un lujazo sónico y que es el idóneo para echarle el cierre a este adictivo directo. ... Toda una descarga de decibelios para tu extenuado cerebro ...

Aunque el sonido no es perfecto ( pero si que es algo mejor que el del oficial Live Album de 1.970 ), suena como una auténtica bomba, por lo que es un buen documento para comprobar como se las gastaban estos bestias en esos dorados años de la banda.

Personal :

Mark Farner : Guitars, Vocals, Hammond, Harmonica.
Don Brewer : Drums, Vocals.
Mel Schacher : Bass, Vocals.